lunes, 27 de junio de 2016

Seminario 2016 / Neuroanatomía del aparato mental

Seminario realizado en abril - mayo de este año.
A continuación algunos aportes de alumnos cursantes:

1- Marcos Menegozzi



                          UNIVERSIDAD NACIONAL DE ROSARIO
                                      Facultad de Psicología
                     Neuropsicología y Psicología del Desarrollo
                           Prof. Tit. : Dr. Roberto Frenquelli
                                            Seminario







         ¿DÓNDE SE ENCUENTRA LA MENTE?
                -DISQUISICIONES SOBRE LA LÓGICA DE LO VIVIENTE-



                                          Trabajo Práctico











Alumno:  Marcos  Menegozzi
Legajo Nº: M-0648/3
Año: 2016









                                                              “Este libro trata del espacio, del lenguaje y de la muerte;
                                                                trata de la mirada.”


                                                                   El nacimiento de la clínica, Prefacio, Michel Foucault.















                                    INTRODUCCIÓN

  La palabra disparadora que abre a mi reflexión es LIMBO. ¿Se encuentra la mente, el aparato psíquico, entre el cuerpo y el alma? ¿Estará en una zona donde su base material sea un intermedio entre el cuerpo y el alma? Donde su asiento sea una materialidad diferente a lo pensado por materia hoy en día. Algo así como una materia flotante de supraenergía.















  De los 2500 años que Occidente viene pensando el cuerpo y el ánima; sólo los últimos 150 años están dedicados en forma sistemática, con método científico y nuevas técnicas al cerebro (al encéfalo); a su anatomía, a su fisiología; al delirio del animal humano de querer explicar todo en él y por él. Charles Bell (1774-1842), fisiólogo y neurólogo considerado fundador de la anatomía nerviosa moderna da un paso importante para ello. El encéfalo es la nueva Piedra Filosofal. ¿Será? Por ahora lo es. Y como lo es por ahora a él me remito para ver cómo mueve a la vida humana. Como sus impulsos, desde los más básicos (Procesos Neuropsicológicos Básicos), hasta los más complejos (Funciones Cerebrales Superiores) determinan nuestro lugar, nuestro posicionamiento en el espacio y el tiempo en el planeta, en esta porción insignificante de universo conocido. ¿Destronó lo Cerebral a lo Divino?
  Como un dios pagano errante, excéntrico; como un joven Diógenes me interrogo por las nuevas sombras que debemos quitar para que el sol nos ilumine. Pero…¡¡¡qué maldita ironía!!!...hago todavía, como hace un par de milenios, preguntas metafísicas.
  ¿Dónde reside la mente? ¿La mente es el alma que nombra Freud? ¿La vida anímica es la mente o el espíritu? ¿El alma y el espíritu son lo mismo? ¡¡¡Oh, beautiful brain, ven a mí, socorredme!!! Dadme basamento para que mi locura no me pierda y comience a discurrir como un filósofo. ¡¡¡Un médico por acá!!!


HUESOS, CARNE, GRASA Y LÍQUIDOS (SOPORTE DE LA MENTE)

  Junto a los intentos de conocer mejor las características anatómicas y fisiológicas del tejido nervioso, tienen lugar también las investigaciones acerca de la localización de las FUNCIONES PSICOLÓGICAS; el intento de hallar EN EL CEREBRO los procesos mentales. Se destaca  en esta investigación el neurólogo alemán Franz Gall (1758-1828). Gall postula el localizacionismo (cada proceso mental tiene asiento en una parte específica del cerebro). Pero esta idea va a ser refutada por el fisiólogo francés Pierre Flourens (1794-1867), el cual postula que el cerebro funciona como un todo único organizado dinámicamente, lo que constituye una idea embrionaria acerca de la NEUROPLASTICIDAD.
  La hipótesis de que las funciones psicológicas complejas tienen su sustrato biológico en la corteza cerebral se vio confirmada por primera vez por los trabajos de Paul Broca (1824-1880), neurólogo francés. En estudios post mortem del cerebro de un paciente que en vida había padecido alteraciones del lenguaje articulado, Broca pudo establecer que existía una lesión en el tercio posterior de la circunvolución frontal inferior del hemisferio izquierdo. Lo que le permitió formular su clásica frase: “Hablamos con el hemisferio izquierdo”. Esto pudo comprobarse experimentalmente en el siglo XX por medio de técnicas imagenológicas no invasivas.
  Esto contribuyó al desarrollo de la psicología experimental como ciencia diferenciada a mediados del siglo XIX.
  No podemos observar directamente a la conciencia, ni al inconciente por más máquinas avanzadas que utilicemos, pero, ¿dónde más “localizarlos” que en el cerebro? Seguramente ya a los seres humanos contemporáneos se nos arrebató la superstición, la ignorancia de querer localizar al aparato psíquico en los pies, en el culo, en el corazón o en los dientes. Pero todavía estamos condenados al misterio. Aún sabiendo que lo psicológico moviliza energía, información y mella en la materia, tenemos un punto ciego insalvable por lo menos hasta ahora. Cerebro, cerebelo, médula espinal, corteza cerebral, tronco encefálico, Sistema Reticular Ascendente, sinapsis eléctricas y químicas, neurotransmisores, hormonas, medio ambiente, el semejante, la caricia, el amamantar de una cálida madre...¿todo esto es el cuerpo y la mente?, ¿todo esto es la lógica del que vive? Todo junto y nada separado, multidiverso, multidimensional, dinámico. Parece que sí. Parece que la única separación es el desgarro del nacer, el fluir de un ambiente endógeno a uno exógeno, el caer a la vigilia en bruto, al kindling existencial. Porque…¿acaso el viviente animal humano puede expresar su ser sin caricias y sin lenguaje?
  Y si en el dormir y el soñar la fisiología humana es lo libidinal por antonomasia, tal vez no haya que hacerse tantas preguntas (sin preguntas hay imposibilidad del avance científico y poético de la vida), y sólo ver con los ojos frescos esa realidad representada por nuestro encéfalo y dejarnos maravillar. Pero somos golosos y queremos más. Queremos destriparlo todo.
  El cerebro es un cerebro en RELACIÓN, es EXPERIENCIA dependiente y expectante. Vivimos en y para lo intersubjetivo. Lo biológico tiene que ver con la diversidad, con la intersección, con la perturbación. Entonces, lo psicológico tiene que ver con la diferencia, con la relación, con contexto, con la complejidad. Con la imposibilidad de pensar a lo aislado en su estado puro. No existe lo aislado sino a condición de ser algo muerto. No existe lo dual: coincido con el Dr. Roberto Frenquelli; creo en el monismo psicofísico emergentista. Y creo porque veo las pruebas en la existencia de lo humano, porque mi acto de fe es carnal, pero endemoniadamente complejo como para solamente quedarme con un pedazo de carne. Porque la carne no habla, se deja hablar por el deseo. Y goza. Y el deseo por si…¿dónde se asentaría sino en la carne? Soldadura.
 
  Sensoperceptivo, hecho un hecho histórico y social, me perturbo. Y por más que me vea en una resonancia magnética, mi mirada no alcanza a verme todo. Me veo errante, careciente, fugaz. ¿¡Hay algo más perturbador que verse por dentro!? Que verse una línea de tiempo que decrece mientras crece, mientras transita el mundo hacia la tumba. Y digo el mundo, digo esa creación del homo homo sapiens, que empezó colgada de los árboles; porque el planeta ni sabe que existimos.
  Materia y espíritu. Neuronas y Ello, Yo, Superyó. Soldadura de lo vital, del azar y la necesidad. Vivimos en ese ir y venir que es un solo camino. Evolucionamos. Caminamos la tierra. Desde lo más primitivo, desde nuestra memoria genética de nuestro “primer cerebro” (impulsos, instintos, lo endógeno, hipotálamo, tronco, médula), caminando hacia el “segundo cerebro” (memoria, aprendizaje, emoción, sistema límbico), hasta el “tercer cerebro” (lenguaje, creación, procesos imaginarios, neocorteza). Si. Caminando. Bipedestando nuestros logros homínidos; siendo el sonido melodioso de un acto musical y la furia gutural de las cavernas. Todo en uno. Todo en un caldo primigenio que emerge porque está impulsado a deber ser, o desaparecer en la noche de los tiempos donde tal vez ni el dormir y el soñar nos contengan.
  ¡¿Dónde se encuentra la mente?! ¿Dónde yace el descubrimiento de Freud? ¿Dónde puedo encontrar lo que no se ve? ¿Será de aire la mente? ¿Estará en el limbo, y el limbo en otro limbo jugando a las escondidas con los niños de un juego religioso? ¿Será todo esto un espejismo, una burla, una traición de algo o de alguien extraterreno? ¿Existimos? ¡¡¡Maldita metafísica!!!! Pero…¿no es estimulada esta metafísica por la mismísima biología? ¿Por la carne que llora y mama y ama y trabaja y muere? 


2-
Lara Tenenbaum



NEUROPSICOLOGÍA Y PSICOLOGÍA DEL DESARROLLO.

MEMORIA EMOCIONAL E INCONSCIENTE PSICOANALÍTICO
SEMINARIO Dr. FRENQUELLI
TRABAJO FINAL.


·      Alumna: Tenenbaum, Lara Judith.
·      Legajo: T-5171/3
·      Mail: Laratenenbaum18@hotmail.com
·      Año: 2016.


Poder elegir un tema de lo dictado en el seminario para realizar este trabajo con vistas de dar un cierre al mismo no ha sido fácil. Comencé por tomar mis anotaciones de clases y el libro “Psicofisiología. Una aproximación bio-lógica a la comprensión del hombre” para lograr encontrar un hilo conductor que me lleve a elección de mi tema y que a la vez me resulte de interés.
Llegue a la conclusión de que el seminario, su libro y la materia en sí tratan de una interrelación. Interrelación entre lo que en nuestra facultad se intenta estudiar como binario, como opuesto.  Es el intento de romper con la lógica binaria, es la lógica de lo uno lo que emerge en esta materia. Y este seminario logró demostrarlo bien. Nos dicen: “el aparato mental es observable desde dos perspectivas diferentes: como un objeto material o como conciencia subjetiva”. Estoy de acuerdo en decir que sin sistema nervioso no somos, y también estoy de acuerdo en decir que existe una historia, una subjetividad, un otro determinante que modifica lo anatómico que traemos desde el comienzo. Ni siquiera Freud ni en su formación ni en sus obras deja de lado uno de estos dos aspectos. Un gran ejemplo es el manuscrito “proyecto de psicología para neurólogos” escrito en 1895. Extraje varias citas que indican su adhesión a lo orgánico: O sea, las bases biológicas del alma  o psique: “La teoría de la libido, descansa mínimamente en bases psicológicas, y en lo esencial tiene apoyo biológico” (Freud, 1914, p. 76). “De lo que llamamos nuestra psique  (vida anímica) son consabidos dos términos: en primer lugar, el órgano corporal y escenario de ella, el encéfalo (sistema nervioso) y, por otra parte, nuestros actos de conciencia, que son dados inmediatamente y que ninguna descripción nos podría trasmitir” (Freud, 1940, p. 143).
Esta conclusión me lo indica un pequeño detalle: todas las clases, usted, en los primeros minutos, dejaba asentado en el pizarrón dos conceptos: uno del lado izquierdo, otro del lado derecho, uno  referido a lo anátomo-fisiológico de nuestro sistema nervioso y otro referido a lo psicológico, a lo psicoanalítico a lo que se nos trasmite (en la facultad y en muchas representaciones sociales) como “lo que no tiene asiento biológico”. Es por esto que mucha gente cree que la psicología, el psicoanálisis y nuestra experiencia subjetiva (emociones positivas y negativas, recuerdos que llevamos a terapia) están simplemente en el aire, que lo biológico es otra cosa, que por cierto está representado como lo más científico y lo más legítimo. Claramente el decir Neuropsicología es ya poder acortar la brecha de lo biológico y lo psicológico y destruir la lógica binaria. Es decir, no todo es sinapsis, no todo es núcleos, nervios, estructuras del sistema nervioso, etc. también hay subjetividad, intersubjetividad e historia personal. Usted bien lo dijo en la primer clase: “lo psíquico siempre esta sostenido en la materia, lo psicológico no es solo lo simbólico”.
Un ejemplo de una clase que me resultó clave para darme cuenta de la trama del seminario fue la primera. Basada en el dormir y en el sueño. No solo se habló de lo fisiológico, del sistema reticular ascendente-descendente. Sino también de libido, de los primeros lazos, el ambiente del recién nacido, entre otros conceptos tomados de otras disciplinas como ser el psicoanálisis.
El tema al que dedico este trabajo no apareció explícitamente en las clases pero creo poder construirlo con la misma lógica que se utilizó.
Me interesaría poder escribir acerca de la memoria emocional. Si bien no es conveniente realizar estos recortes dejando de lado todos los otros tipos de  memoria y demás procesos con los cuales esta última se relaciona, es necesario, para poder resumir, hacer este recorte.
La memoria es una capacidad humana básica, indispensable para la supervivencia y para las funciones psicológicas más complejas. Entra bajo el concepto de dispositivos básicos del aprendizaje o las funciones básicas cerebrales. Es la base de nuestro conocimiento. Esta capacidad tendría que ver con el almacenamiento y evocación de la información o de sus consecuencias.  Signoret determino tres fases para explicar el funcionamiento de la memoria en relación con la información. La primer fase la denomina memorización o codificación tiene que ver con percibir una información nueva y operar sobre la misma utilizando conocimientos ya almacenados. La segunda fase refiere a la conservación o almacenaje, son los procesos que llevan a la conservación de los trazos mnémicos, hasta que estos necesiten utilizarse (archivar). Y por último, la tercera fase tiene que ver con el restituir, evocar eso que se archivó. La memoria no es solo almacenar, sino no tendríamos noticia de ella.
La memoria no encuentra una localización anatómica única y delimitada en el sistema nervioso central. Esto no significa que los recuerdos estén dispersos por todo el encéfalo sino que no todos los recuerdos están en un lugar determinado. Lo que está comprobado es la formación de circuitos de memoria, es decir, redes neuronales donde se dará una facilitación para que el estímulo atraviese más fácilmente un camino que otro. Es por esta razón que cuanto más contacto con, por ejemplo, un estímulo auditivo (ejemplo: una canción) tengamos mayor facilidad tendremos para recordarla. La memoria (y, en especial el aprendizaje) está muy relacionado con la plasticidad neuronal. Esto quiere decir que las experiencias que se van inscribiendo producen cambios neuronales a nivel químico y estructural. Hablar de plasticidad es alejarnos de la determinación genética, es un acercamiento a la psicología / psicoanálisis. Es tener en cuenta lo ambiental  y lo intersubjetivo. Es tener en cuenta la asistencia ajena desde un comienzo de la vida del hombre como elemental, la construcción de subjetividad a partir del otro.
Sabemos que Freud en algunas de sus escritos como por ejemplo “La interpretación de los sueños” y en su carta número 52 a Fliess vemos ya el comienzo de un intento de Freud de dejar atrás un modelo neurofisiológico del aparato psíquico. Si hablamos de memoria, inmediatamente en Freud hay que hablar de Prcc. Es el sistema donde los estímulos internos y externos dejan su huella: la famosa huella mnémica. Constantemente nos enfrentamos a nuevos estímulos que se inscriben en el aparto (plasticidad neuronal). El bien define que para hacer consciente lo susceptible de conciencia es necesario la atención, lo cual nos acercaría a otro de los DBA. Agrega que es el sistema del lenguaje, tiene a su cargo la sensopercepción. Está claro que hasta aquí coincide, por más que se nomine de manera diferente, como se organizan nuestras capacidades psicológicas.
Existe una clasificación de la memoria llamada modelo multi-almacén que habla de tres estadios: memoria sensorial, memoria de corto plazo, memoria de largo plazo y memoria implícita.  Dentro de las memorias a largo plazo encontramos las declarativas y las no declarativas. Estas últimas son también denominadas implícitas ya que no hay posibilidad de explicarlo a través del lenguaje, no hay posibilidad de declararlas. Un ejemplo podría ser el caminar, el subir una escalera (memoria procedimental). El hablar de no declarativo, el no poder hacerlo consciente puede llevar a relacionar esta imposibilidad de palabra a la explicación de Freud acerca de la representación- palabra, representación-cosa. Lo inconsciente reprimido no es susceptible de conciencia (en este caso, de expresarse en palabras) porque no fue investido por la representación-palabra. Todo lo preconsciente deviene por una investidura de la representación- palabra a la representación-objeto. La memoria implícita estaría ligada a las propiedades físicas del objeto (representación-objeto) y la memoria explicita estaría ligada al significado (representación-palabra).
La emoción organiza la percepción, los pensamientos, la memoria, la fisiología, la conducta y la  interacción social. Las emociones organizan las respuestas a estímulos placenteros  o displacenteros. ¿Acaso no es esto lo que Freud dice? La emoción tiene un inmenso valor en la supervivencia, desde los tiempo primitivos vemos como por ejemplo el miedo fue útil para escapar del peligro.  Personas que por ejemplo tienen la amígdala dañada, serían incapaces de detectar situaciones de riesgo o peligro.
La memoria emocional según Damasio (1994) y Nadel (1992) se procesa sobre todo en la amígdala y en la corteza órbitofrontal, aunque hay otros centros de evaluación de estímulos con los que está interconectada. El sistema límbico está ligado a la emoción. Específicamente parece menester aportar información sobre el complejo nuclear amigdalino, alojado cerca del gancho del hipocampo. Es un conjunto de núcleos ubicados en la profundidad de los lóbulos temporales. La amígdala envía proyecciones al hipotálamo, encargado de la activación del sistema nervioso autónomo, es por esto que se dan los cambios en el sistema nervioso autónomo, tales como frecuencia cardiaca, motilidad gástrica y vasodilatación, que acompañan toda emoción. La amígdala juega un rol fundamental en la evocación del contexto emocional de la información.
La amígdala está establecida en sistemas de bajo nivel, lo que justifica que la conciencia como proceso cognitivo superior no pueda aparecer. Es decir, no espera a que la corteza cerebral, interpreta y de significado a los estímulos, También por esto el tiempo de tramitación es mucho más rápido. La emoción es procesada independientemente del pensamiento consciente, es no consciente en el sentido neurológico y también puede serlo en el sentido psicoanalítico. Freud subraya que la forma de la descarga psicomotora en el niño (expresión de las emociones, llanto), sirve para una función comunicativa que al comienzo no es intencional, pero que tiene como efecto despertar en el adulto la acción específica para satisfacer la necesidad, deviniendo intencional después.
Sin embargo, este mecanismo tiene un costo: es por culpa de la amígdala que nos cuesta tanto olvidar los traumas infantiles, las rupturas sentimentales y todo aquello que nos ha hecho sufrir en algún momento. En el caso más extremo, el exceso de actividad de la amígdala es en gran parte responsable de que las personas que han sufrido una violación o hayan sido víctimas de una guerra desarrollen un trastorno de estrés postraumático. No es la única involucrada, ya que el circuito que controla las emociones en nuestro cerebro es complejo e implica muchas más estructuras clave como el hipocampo, la corteza pre frontal o la región anterior de la corteza cingulada. Sin que lleguemos si quiera a darnos cuenta, nuestra amígdala asocia continuamente sucesos que nos provocan miedo o malestar. Pueden llegar a generarnos un profundo malestar, y nuestra amígdala se encargará de añadir ese componente emocional negativo cada vez que se presente la misma situación. Si se permite, se podría comparar la no inscripción del trauma según la concepción psicoanalítica con un alto grado de actividad de la amígdala pero la no ligazón entre el recuerdo de la memoria declarativa con el recuerdo de la emoción de un momento traumático. Es decir, ante una situación similar o ante algún estimulo que se relacione con aquel que no se ha inscripto en la memoria declarativa la memoria emocional intenta resguardarnos de la situación y así se explicaría, por ejemplo, el intento de huida de la fobia. Si hablamos específicamente del trauma infantil podemos argumentar la reacción emocional ante un estímulo pero la falta del recuerdo ya que el lenguaje no se encontraba inscripto como función superior. Al no haber lenguaje, no hay memoria declarativa.
Por otro lado, la corteza órbito frontal es una región del lóbulo frontal que se encuentra implicada en funciones de integración sensorial, en la representación del valor afectivo de los reforzadores, en la toma de decisiones y en la formación de expectativas. Concretamente, se cree que la Corteza orbito frontal humana regula la planificación conductual asociada a la sensibilidad a la recompensa y el castigo.
En definitiva, la memoria emocional es solo un ejemplo de tantos para justificar la falta de argumento para la lógica binaria que atraviesa hoy la Facultad de Psicología. Creo hasta ahora haber comprendido que la materia y específicamente el seminario, van encaminado en este sentido.
Para dar mi opinión acerca del seminario me pareció positiva la experiencia. La duración fue justa y necesaria. Si bien los seminarios de la materia deben ser cortos no creo que en dos o tres clases se pueda llegar a alguna enseñanza. Es por eso, que, comparado con los seminarios más cortos se hace posible la apertura de muchos interrogantes. En cuanto a los contenidos fueron interesantes ya que en lo personal me gusta la línea biológica del plan de estudio. Y esta materia es una interdisciplinariedad que no deja de lado las demás corrientes.

3-
Belén Manzo:



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Trabajo Práctico Neuropsicología.
    

 


    


aLUMNA: bELEN mANZO.
lEGAJO: M-5435/6.
CATEDRA: nEUROPSICOLOGIA.
pROFESOR: rOBERTO fRENQUELLI.


 

 

Introducción:
A partir de las clases del seminario me ha interesado y ha llamado profundamente la atención la temática del dormir y el soñar. Si bien pude inteligir ciertos procesos entorno al sueño a través de la materia Psicoanálisis 1, pero como se indica desde el propósito de esta materia es necesario y preciso poder conocer sus funcionamientos, su fisiología. Desde esta materia la propuesta es ver que lo psicológico está acompañado por lo fisiológico y su correlato anatómico, que explican los funcionamientos neurológicos que experimenta todo ser humano y su conocimiento ha ahondado en ellos para darle una vuelta de tuerca desde otra mirada, no solo teniendo en cuenta a la psicología sino a la neurología, los procesos que se desarrollan en nuestro interior y que probablemente no nos hemos anoticiado de ellos. Por esto decidí tomar en cuenta uno de los temas que se ha charlado en una de las clases e investigar sobre ellos.
Desarrollo:
Una de las funciones del Sistema nervioso central es regular el ciclo del dormir y la vigilia. Dentro del dormir el soñar produjo curiosidad.
Los sueños constituyen una experiencia humana universal y suponen un reto para su estudio desde la neurociencia, la conciencia, las emociones y la cognición. Así, los sueños han sido abordados desde múltiples puntos de vista, que van desde la filosofía hasta la medicina clínica, pasando por la psiquiatría, la psicología, la inteligencia artificial, los modelos de redes neurales, la psicofisiológia o la neurobiología.
Muchos han sido los investigadores que han estudiado la razón de soñar, y han intentado dar explicaciones sobre la conciencia en los sueños. Por ejemplo, Empson planteó que, a diferencia de nuestras experiencias conscientes, en los sueños nos vemos asistiendo a experiencias que ocurren sin el control de la experiencia.
J.Tirapu (2012) plantea: “Los sueños, son considerados como un estado de conciencia caracterizado por un reducido control sobre su contenido, imágenes visuales y activación de la memoria, y mediado por incentivos motivacionales y saliencia emocional.”
Por otra parte, Hobson y Stickgold señalaron las principales características de los sueños: Por lo que los sueños serian alucinaciones, entendidas como experiencias sensoriales principalmente visuales, auditivas y táctiles planteadas como distorsiones cognitivas.
Según Freud los sueños son la representación alucinatoria de un deseo, el cual es infantil, sexual y reprimido.
El sueño es un estado biológico activo, periódico, en el que se distinguen las etapas NREM y REM, que se alternan sucesivamente durante la noche. Intervienen los relojes biológicos en la modulación del sistema, así como neurotransmisores específicos. Se trata de una red neuronal compleja, en la que intervienen diversas zonas del sistema nervioso central. Los procesos oníricos están controlados además de forma neural.
Los sueños parecen afectar a los procesos de consolidación de la memoria, y existe una considerable variabilidad entre los sueños individuales.
Origen del sueño.
El sueño, biológicamente, no es una falta total de actividad, sino que se puede considerar como un estado biológico concreto, un estado conductual, según se viene diciendo desde los años ochenta del pasado siglo.
En contraposición al coma, el estado de sueño es reversible en respuesta a estímulos adecuados y genera cambios electroencefalográficos que lo distinguen del estado de vigilia. La disminución en la motricidad de la musculatura esquelética y en el umbral de reactividad a estímulos son otras dos características de este estado.
El sueño es periódico y en general espontáneo, y se acompaña en el hombre de una pérdida de la conciencia vigil. Sin embargo, aun cuando el hombre tenga sueño, puede, voluntariamente, no dormir.
El sueño tiene distintos grados de profundidad, y se presentan modificaciones fisiológicas concretas en cada una de las etapas del mismo. Para el estudio de los cambios funcionales que se dan durante el sueño se atiende a unas variables que se denominan indicadores del sueño: el electroencefalograma (EEG), los movimientos oculares y el tono muscular.

Etapas del sueño.
Cuando dormimos y soñamos, la actividad eléctrica del cerebro sigue unos patrones particulares, lo que permite hablar de ese proceso en términos de etapas.  Las etapas se diferencian por variaciones en la actividad eléctrica del cerebro, la cual se mide utilizando un electroencefalograma. Las lecturas del electroencefalograma se expresan en términos de ondas.
 Las diferentes etapas del dormir y soñar se identifican por variaciones en la amplitud (o sea tamaño) y frecuencia (o sea, número de veces que se repite una onda en función del tiempo).
Despierto y alerta predominan las ondas beta (alta frecuencia y baja amplitud). Despierto y muy relajado (antesala de dormirse). Se caracteriza por ondas alfa. Estas son de un poco más amplitud y menos frecuencia que las ondas beta.
Según estos indicadores, se distinguen varias etapas en el sueño:
La etapa I, de somnolencia o adormecimiento, en que tiene lugar la desaparición del ritmo alfa del EEG (típico del estado de vigilia), hay tono muscular y no hay movimientos oculares o, si los hay, son muy lentos.
La etapa II - III, de sueño ligero, se caracteriza por una disminución aún mayor del ritmo electroencefalográfico, con la aparición de los típicos husos de sueño y los complejos K, fenómenos de los que es responsable el núcleo reticular del tálamo; sigue existiendo tono muscular, y no hay movimientos oculares.
La etapa IV, de sueño profundo, presenta un ritmo electroencefalográfico menor, no hay movimientos oculares y el tono muscular se mantiene o puede estar muy disminuido. En la instauración de esta fase del sueño intervienen, entre otras estructuras, la corteza prefrontal y el núcleo dorso medial del tálamo. El Insomnio Familiar Grave es una enfermedad de tipo priónico y evolución fatal que fue descrita por primera vez por Lugaresi y su equipo en los años ochenta, cuyo estudio permitió descubrir la importancia de tal estructura talámica para la instauración del sueño lento o profundo. Es la fase del sueño más reparadora. Hay movimientos organizados del dorso; el individuo da vueltas en la cama, cambia de postura. Esta fase dura aproximadamente un 25% del total del tiempo del sueño.
Las etapas I a IV se denominan en su conjunto sueño no REM (NREM).
La siguiente etapa es la de sueño paradójico, que se caracteriza por una actividad EEG que recuerda al estado de vigilia (por eso se habla de sueño paradójico), debida a una activación cortical por parte de estructuras encefálicas profundas, como es la formación reticular activadora. Fue descubierto por Kleitman y Aserinsky, junto con Dementa, en los años cincuenta del siglo pasado. Hay una desincronización del EEG, que se asemeja a una situación de vigilia, de alerta. Se observan movimientos oculares rápidos (también se habla de sueño MOR, de movimientos oculares rápidos o sueño REM, de rapid eye movements), dependientes de la actividad de estructuras profundas tales como la formación reticular pontina. Se produce una atonía (desaparición del tono muscular), de lo que son responsables estructuras como la formación reticular bulbar, el locus coeruleus, etc. El músculo diafragma sigue manteniendo el tono, y contrayéndose, permitiendo la respiración. La fase de sueño REM constituye un 25 % del sueño total. En el recién nacido, el sueño REM constituye el 50% del tiempo total de sueño. El tiempo de vigilia va aumentando con la edad, cada vez se duerme menos, y cada vez hay menos sueño REM. Parece ser, en líneas generales, que el sueño paradójico se produce, filogenéticamente, cuando la corteza cerebral está más desarrollada. De la instauración del sueño REM es responsable el tronco del encéfalo, concretamente un grupo de neuronas que también descargan en la vigilia (el centro nodal es el núcleo reticular pontino oral, cuyas porciones ventral y paramediana reciben conexiones de múltiples estructuras relacionadas con el control del ciclo vigilia-sueño), produciendo una activación de los sistemas colinérgicos.
Las fases de sueño NREM y REM se alternan sucesivamente, cuatro a cinco veces por la noche. En total, la fase de sueño NREM dura unas 6 horas; y la fase de sueño REM, dos horas, por término medio. Es más fácil despertar al sujeto en la fase de sueño REM que en la fase NREM. Los medicamentos antidepresivos reducen el sueño REM y las benzodiacepinas acortan o suprimen las fases III yIV.
La etapa REM adquiere su nombre de “Rapid Eye Movement”. En español se le denomina MOR (Movimiento Ocular Rápido). El nombre describe algo que caracteriza esta etapa y es el hecho de que los ojos se mueven rápidamente en distintas direcciones.
Se sabe que pasar por la etapa REM es importante porque ayuda a la recuperación mental. Personas que son privadas de la etapa REM manifiestan déficit de atención, problemas en el aprendizaje, memoria y el estado de ánimo. También muestran un efecto rebote, esto es, una tendencia a pasar más tiempo en REM para recuperar lo perdido.
Algunas drogas, incluyendo los sedantes que se utilizan para dormir y el alcohol, privan a la persona de pasar por REM, por lo que la calidad del sueño de estas personas se ve altamente deteriorada.
Dormir y sueño.
Dormir y soñar son dos procesos diferentes, pero estrechamente relacionados. Por lo regular, se considera el soñar como una etapa dentro del dormir.
 El dormir se considera un ritmo circadiano, lo que significa que la alternancia dormido despierto responde al patrón día - noche.
El sueño es por lo tanto un estado dinámico, en el que se activan e inhiben distintas zonas del encéfalo. Obedece a un ritmo biológico, circadiano (cada 24 horas), al que se ajusta el proceso. De por sí, el ritmo sueño-vigilia es cada 25-29 horas, según se ha estudiado experimentalmente en voluntarios encerrados en una habitación a la que no llegan las influencias exteriores. Pero la presión del sueño aumenta en torno a las dos de la tarde, lo que explica que sea fisiológico sentir sueño después de comer. La voluntad puede evitar el dormir después de comer.
Existen unos relojes biológicos en el sistema nervioso central. Uno de ellos, situado en el hipotálamo, establece el ritmo sobre los otros relojes biológicos, situados caudalmente, y hace que el sueño NREM y el sueño REM duren un tiempo fijado. Intervienen en su regulación no sólo, y de modo fundamental, los impulsos retinianos, sino también otras influencias, como es el pH de la sangre o la glucemia. El hipotálamo no es responsable en sí mismo del ritmo vigilia - sueño, pero sí forma parte de las redes neurales implicadas en el proceso, redes neurales sobre las que deben de actuar diversos sistemas para hacer que el proceso quede anulado por un tiempo, y al fin y al cabo retrasado. Las conexiones eferentes del hipotálamo son muy profusas, e incluso bilaterales: hacia el hipotálamo posterior, región preóptica, núcleos del septo, núcleo paratenial, núcleo paraventircular del tálamo, núcleo ventral lateral del tálamo y glándula pineal.
El proceso del ciclo vigila-sueño está regulado por una red neuronal compleja en la que intervienen diversas zonas del sistema nervioso central, a base de activaciones y de inhibiciones, cuyo resultado es la vigila o el sueño.
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La persona está marcada ya desde antes de niño, de antes de nacer por su plantilla genética, su dormir/vigilia establecido por la vida intrauterina. Él bebe en el momento del dormir está marcado, hay una influencia de la luz. En el útero se deja llevar de acuerdo a la homeostasis de la mamá. Tiene ciclos endógenos en la vida intrauterina, separado del mundo externo, que llega con variaciones. Estos ciclos endógenos establecen los ritmos endógenos que acostumbró en el útero, en su disposición dormir/vigilia.
Teorías del sueño.
Modelo de activación y síntesis: De acuerdo con este modelo, los sueños tienen una razón fisiológica, no psicológica. En términos generales, le explicación que este modelo ofrece es que los sueños son el resultado de la interpretación que el cerebro produce de la activación de distintos centros (visión, audición, memoria) que se genera a raíz de la actividad eléctrica que se suscita durante REM.
Teoría de “soñar para sobrevivir”:  Según esta teoría los sueños encarnan preocupaciones de nuestro diario vivir, ilustrando nuestras incertidumbres, indecisiones, ideas y deseos.  La función de los sueños es reconsiderar y reprocesar información que es crítica para nuestra sobrevivencia diaria. Investigaciones relacionadas con el desempeño en tareas visuales motoras indican que si el sujeto es privado de REM su ejecución en la tarea disminuye.
 Perspectiva freudiana:  Según Freud, los sueños reflejan las urgencias y deseos inconscientes, que son mayormente de naturaleza sexual y agresiva.  Durante el sueño hay un particular encuentro entre los planos de lo consciente y lo inconsciente.  A pesar de que hay expresión de lo inconsciente, esto se hace de manera disfrazada para no atentar contra las normas de la conciencia.
Por eso, dice Freud, el sueño se da en simbolismo o en dos planos. Por un lado, está el contenido manifiesto que se refiere a aquello que recordamos del sueño. El significado real de lo que soñamos, o sea, el significado de los simbolismos constituye lo que Freud llama el contenido latente.  La interpretación del sueño requiere partir del contenido manifiesto para llegar al contenido latente.











Bibliografía:







 
 








jueves, 19 de mayo de 2016

Espacio para consultas 2016 / Afrontando tiempos difíciles

Aquí podrán dejar sus consultas, aportes y opiniones los cursantes de Neuropsicología y Psicología del Desarrollo 2016. Con la Profesora Peirano y otros colegas iremos contestando. Así podemos llegar a armar un pequeño texto que ayude al cursado en estos tiempos difíciles.

En tanto vamos entrando en temas..., les recomiendo revisar los blogs desarrollados en años anteriores. Encontrarán muchas cosas de interés para ir metiéndose en tema.

lunes, 27 de octubre de 2014

Etología y Teorías en Psicología / Psicoanálisis

Este es el nuevo espacio para discusión e intercambio en el Seminario "Etología y Teorías en Psicología / Psicoanálisis"

Lecturas sobre John Bowlby En la página Web de nuestra cátedra

jueves, 14 de agosto de 2014

A cada cual su cerebro. Plasticidad neuronal e inconsciente.

Es un nuevo seminario del curso regular 2014. Toma su nombre de la excelente obra de P. Magistretti y F. Ansermet, que será el texto "guía" de nuestra labor de reflexión.
En el mismo participan los estudiantes M. Mazzola, C. Giovannoni, M. Toñanez, A. Aragone, M. B. Lafontana, E. Bessone, A. Racca, L. Stremiz, L. Wyngaard y M. Sánchez.

Los citados deberán postear en este blog; que también está abierto a la comunidad, con la finalidad de ir armando un diálogo que intente desarrollar ideas en torno a la temática elegida.

Esquema tomado del libro "Neurociencias y Psicoanálisis", sobre percepción, huella sináptica y huella mnémica, con las consolidaciones y reconsolidaciones propias de la Plasticidad Neuronal. Trabajado en la clase del jueves 21 de agosto del 2014.